Antecedentes:
Otra vez debo agradecer al Limay Superior.
Cuando el Avión salió a horario este viernes de BSAS no lo podía creer. Antes que anochezca estaba en ese Río, sólo con mis bolsos y abrochando los botones del saco que allí era solo un recuerdo de la Ciudad. Qué paz!.
Atardecer de maravillas y a alistar los equipos para la pesca de los dos días siguientes.
El Río, ubicado en la Patagonia Norte y a escasos minutos de la turística Ciudad de Bariloche, estaba esplendido como siempre.
Flotamos el sábado y domingo. Cada día una jornada agotadora de 10 o 14 hs.
Excelente clima, apenas a veces alguna rachas de viento.
Todo estuvo de diez. Sólo quería flotar y castear una y otra vez las moscas contra el veril, al medio del Río, a los palos, a los sauces, etc.
Así lo hice.
Lo técnico:
– Peces: Saqué en ambos días unas 50 truchas.
Lo resaltable: 45 marrones 5 AI.
Si bien no salió un “zapallo gigante” como puede dar ese Río, lo cierto es que el 80% de las capturas rondaron el kilo a 2 kilos, con una Plateada que superó ese peso.
Muchas “grandecitas” al contrario de otras aperturas que uno se llena de “sardinitas” de 100 a 300 grs.
– Equipo: Use caña N6, ST 225 grains de poco hundimiento y running Varivas de 24 lbs. (me resultó excelente ese equipo).
– Moscas: Las típicas (casi ni tiré una WB, pues pican mas las AI).
Algunas medianas pero luego grandes y rabbit (dependía el tipo de pesca la mosca que usaba). Lo fundamental es que no se enrede su cola.
– Tipo de pesca: La mayoría (80%) “al golpe” como le digo yo, o a la “pasada” como le dicen allí. Flotar e ir tirando en lugares “calientes”. A veces vadeaba. Siempre tiraba y apenas caía recogía.
Pocas veces use la deriva; la que me resultó en una corredera con lindas AI y marroncitos que tomaban en “deriva controlada” haciendo mover el rabbit de la mosca con tironcitos de la caña manteniendo tensa la línea (muy divertido).
Un pique de novela.
Tiro a los palos balsa flotando. Stripeo al toque y enseguida sale una linda marrón que sigue la mosca y acelera para tomarla. Yo acelero mas recogiéndola. Se me acaba la línea, la mosca queda al lado del bote ya (la trucha atrás de ella) y hago el “abanico” con la caña para que la mosca siga trabajando pese a que no tenia línea ya. La marrón la sigue de nuevo pero no tengo mas lugar y debo levantar. Al levantar la mosca la marrón se corre unos metros y se queda flotando a la par de la balsa como desorientada. Giraba como buscando su presa (a escaso cms. de la superficie).
En seguida le hice un nuevo tiro. Muy corto porque ella estaba allí flotando a la par nuestra. Apenas cayo la mosca por segunda vez (como a 4 mts. porque nos movíamos y no tenía puntería) la trucha gira, la ve y se le abalanza de nuevo. Otra vez lo mismo que antes, me quedo sin lugar y debo levantar la mosca. La trucha se aleja nuevamente pero por la superficie, no al fondo. Queda de nuevo a la par de la balsa que seguía flotando por la corriente del Río. Ella como buscando la presa que se le fue.
Apenas levanté esta segunda vez, hice un “levante y tendido” los más rápido que podía. Le tiro así de nuevo la mosca que ahora (tercera vez) cayo justo a un metro de ella. Un tiro de apenas 5 mts. Ella giró rápidamente y sin dudar se le tiro encima en milésimas de segundos. Está vez la saqué. El guía y yo no podíamos creer la voracidad de ese pez, de ese pique y espectáculo que habíamos visto. Increíble!.
Bueno, espero que puedan ir porque la verdad que lo veo muy bien al Limay Superior. Hay muchos peces y se ven en el fondo (como siempre) cada “tronco” de esos que te dejan con la boca abierta y que no sé cómo se hará para sacarlos.
Por de pronto con los que agarré ya me alcanza.
Un saludo a todos.
Mariano Vaquero
